En realidad la pandemia h celebrado un proceso que ya se estaba dando y que es la transformación digital y los cambios de hábitos de los clientes. Los clientes, en plena pandemia sin poder acercarse a un banco o comprar o por medio a salir han multiplicado sus operaciones a través de un dispositivo electrónico. El mismo camino seguirán empresas como Zara u otras muchas ya que, cada vez más el negocio digital gana mercado en detrimento del contacto físico. Y esto ahorra muchos costes a las empresas, desgraciadamente. Además, en el caso de los bancos, con los bancos centrales dándole a la maquinaria de dinero y prestándolo gratis (esto si que es una peletera burbuja que cuando se caiga, se caerán muchos países, los primeros los más endeudados), los bancos han perdido poder como prestamistas.