El problema es que hay cierto sector que aprovechando la crisis, la convulsión política y el cabreo de la gente, ha visto el caldo de cultivo ideal para promover una revolución y la oportunidad de oro ha sido cuando, los lideres políticos se han sumado a esa rebeldía.

Por primera vez en sus vidas han tenido unos representantes que hacen lo que ellos desean, desobedecer. Y este es el motivo de las medias tintas, nunca quisieron que fueran juzgados y se agarran a esos políticos rebeldes como a un clavo ardiente, todo a una carta. Terminarán achicharrados

Ven en los manifestantes e independentistas a esa masa útil que comparte ciertos intereses políticos así que se mueven entre la defensa y la tibieza.

Las cosas se les han torcido mucho últimamente así que algún tanto tienen que apuntarse para levantar la moral.

En cuanto a lo que dice Albert, es obvio que en un juicio se juzgan hechos, acorde a la legislación pero debemos hablar con propiedad. Por otro lado nuestras interpretaciones jurídicas poco valor tienen, puesto que aquí no hay juristas y ni siquiera los juristas se ponen de acuerdo.