La de Saul no está mal. Hace poco me he visto la segunda temporada y me ha gustado. Claro que no llega a los niveles de breaking bad, además el argumento es distinto. Más bien trata de los inicios de Saul (Jimmy McGill) como abogado, y supongo que la serie continuará hasta que él llegue a ser lo que es en breaking bad, esto es, un abogado de mafiosos que se mueve en la fina línea de lo legal y lo ilegal. A su vez salen algunos otros personajes que se han podido ver en la serie original, algunos sin llegar a ser todavía lo que eran en la serie y otros ya siéndolo.
En general merece la pena. Además las temporadas son de diez capítulos, así que no se te hace pesada.