Entre las bandas formadas en San Diego, diría que mi favorita es Iron Butterfly. En aquel ya lejano año de 1968 donde por momentos todo parecía posible, la ocurrencia de tocar una canción durante 17 minutos, con un material de partida digamos que más bien escaso, era a la vez minimalista y precursora. Escuchemos In-A-Gadda-Da-Vida: