Me parece muy bien que hayas abierto un nuevo hilo.

Todavía sigo flotando por la sesión del jueves. Estoy contigo en que es una obra de intensa belleza. Me quedo con la frase de Monteverdi que citan en el libro "Música Clásica" de Espasa: "El fin de toda música buena es conmover el alma". Bueno, pues esta lo consigue.

Tuve la misma sensación que tú al ver y escuchar esos instrumentos tan viejos y curiosos. Tenían algunos una pinta terrible, especialmente las trompas y las cornetas. Pero qué sonido tan especial!!...

No lo comenté en mi anterior mensaje, un poco por vergüenza. Pero al terminar el concierto, los músicos y cantantes salían por la misma puerta que el resto. Me produjo una sensación extraña, de emoción el tener ahí tan cerca a los que momentos antes me habían hecho temblar. Y eran gente normal!! No dioses, ángeles o nada por el estilo, no, gente normal. Y también salió Don Rinaldo. En un momento en que se despistó y en un arrebato tipo quinceañera tras su adorado ídolo, le abordé, le di la mano y las gracias, le felicité por el concierto y por su trabajo y le pedí que me firmara el panfletillo. Habla bien castellano. Sé que es ridículo, pero es que se me fue la olla.

Ayer compré la reciente versión de la Venexiana y la estoy digiriendo poco a poco. Me gusta, pero el listón está muy alto. Me parece algo nuevo y distinto a lo que yo escuché.

Hay un instrumento, que no sé cuál es, que me chirría un poco. Destaca mucho, por ejemplo, en el corte 4 del segundo CD; cuando entra Caronte. ¿Qué instrumento es ese?

Saludos.