Ole ole y olé!
jejejeje
Se nota que te has desquitado y sinceramente no creo que sea machismo lo que dices.
Estoy contigo ManuelBC.
Doy mi pensamiento en voz alta:
Creo que el feminismo extremo es tan chungo como el machismo extremo. Estoy con Tassadar en que una mujer si puede comprarse todas las pinturas del mundo, 20 mil zapatos, cambiar de color de pelo cada 2 por 3, etc, pero no puede un hombre comprar un televisor de 1000 euros en lugar de 800 por Dios! que disparate, que hombre más machista!
Amo a mi mujer, y con el tema tecnología, no tengo problemas, si fuera por ella compraba el televisor 4K, pero si es cierto lo que dice Tassadar, un hombre por ejemplo puede ir a 20 bodas con el mismo traje y no pasa nada. La mujer no puede repetir vestido, aunque sean de familias diferentes, aunque no vaya a haber ninguna persona que hubiera estado en la otra boda, por cojines (con perdón) tiene que ir con vestido nuevo. Y quien dice vestido, dice bolso, evidentemente uñas a juego, maquillaje, peinado, zapatos buaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa aaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
al caraj#!! si uno se quiere dar el capricho... pues adelante!
Yo no soy hombre de ir al fútbol, ni de ir al bar, soy el tipico "juancojones" ó "lo que diga mi mujer" que ayuda en casa, que todo es poco para su amada, etc, etc, etc. Lo reconozco e incluso me siento bien conmigo mismo de ser así, no lo puedo evitar, soy un romántico jejeje. Pero de vez en cuando, hay que mirar por uno, sino revientas, al menos de vez en cuando, hay que darse un capricho. Yo este verano, le compré a mi mujer un móvil nuevo, que estaba la pobre ya desesperada por uno, y yo me di mi capricho igual, me compre mi bluray y mi barra de sonidoYo no me metí en el que ella eligió incluso le dije que algunos euros más se podía gastar, y ella no se metió en lo que yo compré. Resultado, ella loca con su móvil, y yo loco con mi compra.
Esto no sé a que viene, pero bueno, ya lo he soltado.
PD. Soy feliz. Larga vida y prosperidad !







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Yo no me metí en el que ella eligió incluso le dije que algunos euros más se podía gastar, y ella no se metió en lo que yo compré. Resultado, ella loca con su móvil, y yo loco con mi compra.
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