Desde luego que han revolucionado el mundo de los DLP pero no son más baratos que la competencia. En realidad lo que ha cambiado el juego es el triple láser.
Anker o Hisense también tienen lo suyo en DLP.
En lo que han revolucionado ha sido en su algoritmo EBL. Por fin un sistema que funciona lo suficientemente bien para adaptar la potencia de los láser a las necesidades de contraste de la imagen. El modelo Pro 2 cuesta 2.999 euros, y compite directamente con modelos de Sony o JVC que cuestan más de 5.000. Por lo tanto si que considero que lo que ofrecen por su precio es notablemente mejor. Desactivando el EBL no se diferencia mucho de un C2.
El precio del Max esté más hinchado. Ya sabemos que a estos niveles las pequeñas mejoras se pagan a precio de oro, y no tiene una relación tan interesante.