Reglas básicas del HIFI en cajas.

-La sala importa más que el resto de equipo. O adecuas la sala o ecualizas los altavoces, a pelo y sin más o viene el espíritu santo o será difícil que suene bien a la primera.

-Más caro no significa mejor, por lo arriba citado. Un caja (por muy cara que sea) con woofer de 4" pulgadas difícilmente dará SPL decente para una habitación de 60 m2 y viceversa, unas cajas con woofer de 10" (por caras que sean) difícilmente sonarán bien en una sala de 9 m2. En un caso fallará el SPL y en el otro la bola de graves se comerá el resto de frecuencias y detalle, solo paliable en parte con mejoras acústicas.

-Las cajas han de adecuarse a la sala, la sala a las cajas es imposible porque requiere tirar paredes o construir un recinto nuevo. por mucha acústica que pongamos.

-El tamaño de woofer y la potencia soportada por el mismo manda en el SPL (el tamaño sí importa por si todavía hay algún pardillo que lo dudaba).

-El tamaño de caja o recinto de resonancia importa mucho, sobre todo para el grave y subgrave.

-Para dos cajas de igual presupuesto mejor quedarse con la que nos de más tamaño de woofers y de recinto acústico que con la que da menos. Si una barata nos da más woofer y recinto que otra más cara es más aconsejable la barata porque soportará mayores SPL sin distorsión y si una caja más cara nos da mayor woofer y recinto será más aconsejable que la barata por la misma razón, el tamaño importa.

-Una caja barata solo se puede desechar porque esté mal fabricada o suene mal, y una cara es desechable por lo mismo además de porque resulta cara, es decir si está igual de bien fabricada y suena igual de bien que la barata es de tontos comprar la cara. Como lo de sonar mal se comprueba a simple escucha y lo de mejor fabricada abriéndoles las tripas si no podemos comprobar ninguna de las dos cosas lo sensato es comprar la barata porque al menos palmamos menos dinero.

-Si un equipo suena mal es que hay algo mal, en la propia música, en la instalación, en la configuración o en la fabricación de los componentes. La mala fabricación salta a la vista porque se ven los desperfectos, la mala música suena mal en todos lados y la mala instalación o configuración solo la sabemos nosotros y si no la sabemos es que no tenemos ni idea y es muy probable que esa sea la causa.

-Escuchar equipos HIFI no es lo mismo que escuchar música HIFI. Lo primero puede convertirse en una obsesión muy mala para el bolsillo y lo segundo al menos culturiza.

Podría seguir y escribir un libro pero ya es tarde... si alguno quiere seguirla ya sabe.