Otra opción es que empieces el juego de gatear. Pones el subwoofer en donde te vayas a sentar y lo haces sonar. Empieza a gatear por la habitación, verás que hay zonas donde los graves se escuchan mucho más y otras donde los notas menos. Ubícalo en una donde más se escuchen.
Parece broma, pero este método es efectivo.