No es fácil distinguir entre la misma música comprimida a 320 kbps y sin perdidas. Se necesita escuchar en un equipo con cierta resolución, prestar atención, conocer bien lo que se está escuchando y/o saber más o menos por donde van los tiros del algoritmo de compresión.

Esto en una prueba a ciegas, obviamente. Luego, en el día a día, el efecto placebo campa por sus respetos. A todos nos pasa, a mí el primero.

Imagino que ManuelBC está escuchando Spotify Lossless a partir de Spotify Connect en su plataforma BluOS. No estoy seguro que a partir de Android en el propio móvil y con un DAC/amp la aplicación de Spotify evite el resampling de Android.