Lo de la Sexta ha sido un apaño del Gobierno para dar un canal más a ciertos productores amiguetes, como lo de la Cuatro. Las concesionarias de TDT y las privadas recurrieron pero al final el Gobierno les tapó la boca reduciendo la porción publicitaria de TVE.

Por otra parte, deben garantizar cobertura total (o casi total) para poder ver el Mundial de Fútbol, según la Ley de Retransmisiones Deportivas de Interés General y además, el parque de receptores TDT todavía es limitado.