Lo que ocurre a veces en este país a veces toma tintes demasiado cómicos. Como bien sabréis, fotocopiar y distribuir libros va en contra de la propiedad intelectual. Sin embargo, esto no parece haber importado mucho a ocho personas que se dedicaron a fotocopiar más de 1300 libros para después pasarlos a formato PDF, y finalmente imprimirlos con fines lucrativos. Pero lo más anecdótico de esta situación es que realizaban su actividad delictiva a plena luz del día, donde todo tipo de personas anónimas podían percatarse y después poner una denuncia ante las autoridades pertinentes.

Durante un tiempo se instalaron cerca de las universidades más importantes de la Comunidad de Madrid (Leganés, Fuenlabrada, Mostoles, Leganés y Getafe) para vender manuales didácticos a los estudiantes de la zona a un precio mucho más bajo que los libros oficiales. De esta forma, recibían unos beneficios inmensos sin apenas hacer nada. Tan sólo tenían que poner los libros en el escáner, pasarlos a formato PDF y después “hacerse de oro” a costa de la propiedad intelectual de los demás.
Sin embargo, finalmente, agentes de la Policía Nacional les han detenido por este delito. Entre todo el material incautado, se han requisado ordenadores, listados de clientes y más de diez discos duros repletos de manuales didácticos que después vendían a jóvenes estudiantes de las distintas universidades madrileñas.

De esta forma, queda demostrado una vez más, que a pesar de que la tecnología está llamada para hacernos la vida mucho más fácil, también sirve para que los delincuentes puedan realizar sus actividades ilegales de una forma mucho más fácil y sencilla. ¿No creéis?