Tu evolución ha sido muy parecida a la de muchos de nuestra quinta. Yo ya soy cuarentón (sólo 40 ¿eh?) y el 1er. aparato fue un AKAI de 35w que sonaba para mi de pelotas. Con loudness, claro, y a los pocos años compré un ecualizador Yamaha para ponerlo en V y flipar (qué tiempos...). Al independizarme compré ampli y CD Marantz, y cajas Polk Audio, y recuerdo la primera impresión: "esto no es para tanto...", así que corrí a la tienda a por el equalizador gráfico con analizador de espectro Marantz a juego, y lo volví a poner en V pero no tanto, ahora flipaba más porque además veía cómo se movían las barritas. Petó todo el equipo Marantz salvo el eq. (de ahí que siempre me queje de la fiabilidad de la marca), y corrí a comprar otra cosa. Sobre el papel el ampli Yamaha AX497 daba 90 w contra 50 w de mi Marantz, y pensé que la diferencia sería enorme, me equivoqué: distorsión, chillón como un gorrino en visperas de Navidad...sólo se escuchaba bien a volumen bajito, y tenía tanto brillo que quité el Eq. Volví a salir corriendo pero para cambiar el ampli Yamaha, y tiré a por lo seguro dentro de un presupuesto ajustado (acababa de nacer mi hijo y no quería centrarme en nada más), así que me aconsejaron el Denon 700, que con sólo 50 w daba más presencia que el Yamaha (y costaba 60 euros más). Me gustó su fiabilidad, y su sonido sin llegar a la calidez del Marantz, era bastante equilibrado (aunque seguía tendiendo al brillo como buen japonés). Al año compré el lector a juego Denon DCD700 (espectacular aparato por 4 duros). Mientras tanto las 1as. Polk petaron también y en garantía me dieron el modelo equivalente. Su sonido me ha permitido pasar sin sobresaltos de las cajas AKAI de 3 vias a las de 2 vias, ya que Polk suena efectista pero sin pasarse (no llega a la brillantez de JBL). El eq. lo tengo ya definitivamente guardado, y me he reeducado el oido para escuchar la música de forma más natural, eso sí, el loudness siempre lo tengo conectado porque da presencia a la música a bajo volumen, que es como la escucho casi siempre. Lo próximo cuando mi hijo me deje tranquilo, será comprar el ampli de mis sueños, de esos con sólo 2 o 3 botones, y muy europeo...si mi mujer me deja, claro.
El tipo de música influye bastante en cómo la escuchamos: con la edad he tendido más al folk, al soul, y he dejado el rock, el garage, el pop saltarín... vamos, los sonidos me gustan ahora más orgánicos, y para escuchar esto es mejor una respuesta más plana en todo el sistema.