El acuerdo de incorporación de la Álvaro de Bazán a la flotilla del Roosevelt lo empezó a negociar el Ejecutivo de Aznar con Washington en el 2003, si bien fue sellado el 26 de abril del 2005. Publicitado como un proyecto para demostrar que los barcos de uno y otro país son «interoperables», el convenio lo firmaron en Rota el jefe de la Marina, Sebastián Zaragoza Soto, y el comandante de las Fuerzas Navales de Estados Unidos en Europa, Michael G. Mullen.
Lo que no dijo Defensa
Aquel día, Defensa informó de que el documento establecía dos fases de colaboración: una de entrenamiento conjunto, que se celebró de mayo a julio en aguas del Atlántico, y otra de despliegue real, entre septiembre del 2005 y marzo del 2006.Sin embargo, en su comunicado público, el gabinete de José Bono eludió explicar los lugares del mundo que las unidades recorrerían y con qué funciones exactamente.