Como esos hay mil, y demuestra lo fácil que es engañar al cerebro.

Como digo, una vez acostumbras al cerebro al "nuevo blanco", éste automáticamente realizará los "ajustes" pertinentes para que así lo percibamos.

Si se ve "demasiado amarillo" es que hemos estado viendo un blanco incorrecto en las teles durante demasiado tiempo, me temo.