Estuve viendo el otro día Tar, la famosa película en la que Cate Blanchett interpreta a una directora de orquesta que es una estrella. Yo diría que es una película extraña tanto en el fondo como en la forma. Se distinguen dos partes claramente, la primera que presenta al personaje y el mundo de la música clásica desde un punto de vista del negocio y la mercadotecnia y una segunda que se adentra en el aspecto dramático del declive de la directora provocado por una especie de Metoo inverso que tiene su gracia, en cualquier caso la sensación que te deja es que no esta bien terminado el guion, no sabes muy bien que es lo que te quiere contar la película del todo, o quizás después de lo larga que es parece que no te cuenta nada en profundidad.

Estilísticamente la primera parte está muy bien y tiene una fuerte impronta al Kubrick de Eyes Wide Shut en esas primorosas composiciones marca de la casa, las iluminaciones, decorados y los planos que se usan. La segunda toma otro rumbo menos definido y un poco más convencional. Esto es curioso porque luego me enteré que el director aparece como actor en la película de Kubrick en el papel del pianista (el que le facilita la famosa contraseña de "Fidelio" a Tom Cruise para la fiesta).

Cate Blanchett que es una de las actrices más carismáticas de los últimos tiempos y que tiene esa cualidad a lo Katherine Hepburn de interpretar los roles masculinos, femeninos y neutros de las películas en las que actúa esta muy bien, quizás la veo un poco sobreactuada y con unos diálogos que a veces suenan un tanto pedantes. Toda la película es ella.

En resumen si te gusta la música clásica y toda la memorabilia que la rodea te lo vas a pasar pipa, tiene multitud de referencias reales y de hecho su papel tiene muchas semejanza a la famosa directora de orquesta Marin Alsop (lesbiana, casada, un hijo, imparte clases en Julliard...) a la que por cierto se cita en uno de los diálogos. A los que les va a dejar muy mal cuerop es a los Woke, los identitarios, los Metoo, los de la cultura de la cancelación y todos esos movimientos.



Una película que vale la pena ver al margen de sus posibles imperfecciones, a fin de cuentas trabaja en una latitudes de riesgo y atrevimiento que se sale de las grandes producciones actuales.

Saludos