Además de lo que dice atcing (con lo que estoy muy de acuerdo) está el dato siguiente: nadie que se ha comprado un proyector de los que has llamado decentes se ha arrepentido y vuelto a visionar ciertos contenidos en el plasma o LCD. Así pues, algo tendrá que tener el proyector...no solo tamaño.

Es cierto, no son comparables, un proyector no sustituye ni debe hacerlo a una TV, es un complemento. Y como tal complemento, en un sitio adecuado (una TV es más fácilmente ubicable) da un resultado nada desdeñable.

Ponte un Sony o JVC (dentro de las marcas punteras en proyección doméstica económicamente asumible) en una sala con paredes no blancas y una pantalla decente con enmascaramiento. Pon un bluray. Ahora plantéate la calidad del plasma si quieres.