Aunque como bien dice Mounix, no hay un criterio definido creo que algunas reglas básicas si que se pueden establecer.

Para sala dedicada:
La característica principal de una sala dedicada es que es toda negra y no hay reflexiones parásitas. Por lo que el proyector puede aprovechar al máximo el contraste que tenga, y en cambio no necesitamos mucha luminosidad. Para este contexto yo me iría claramente a proyectores de alto contraste real (olvidarse de lo anunciado por los constructores). Los clásicos JVC como no, pero también los Sony o Epson de gama alta

Para sala no dedicada:
Habrá reflexiones parásitas, así que el proyector no aprovechará al máximo el contraste que tenga. Además suele haber mas luz, ya sea por luz residual del exterior o por rebote del propio proyector por lo que es conveniente disponer de algo mas de luminosidad que en el caso anterior.
Cuidado, un proyector con un alto contraste se seguirá viendo mejor que uno normal aunque la sala no sea dedicada, simplemente que no se aprovechará al máximo su potencial
Respecto a proyectores, depende de tu presupuesto. Cuanto mas caros mejor se verán, por supuesto. Pero en esta categoría los proyectores tipo Benq W1070 suelen dar muy buen resultado. Y si dispones de presupuesto, antes que irme a uno de los proyectores de gama alta que indicaba antes, personalmente me decantaría por una pantalla gris de alto contraste (seguramente una lusoscreen por ser de las mas económicas) + el mejor proyector que pueda con lo que me quede de presupuesto.

Un saludo