Ya sabes, los puentes y todo eso, te pondré en el título el tema del vintage que hay por aquí varios aficionados a él, seguro que alguno aparece.

Si que será más delicado el más antiguo, y el más actual te aumenta las posibilidad de elegir altavoces que precisen más potencia.

Si no tienes altavoces, el camino es el inverso, primero elegirlos tras escucharlos, y luego en base a su sensibilidad e impedancia, por un lado, y al nivel de escucha, distancia al oyente y características acústicas de la sala, elegir el amplificador que de la potencia y corriente que precise, con un margen de reserva añadido.

Por ello te decía que entre esos dos me quedaría el más potente, que por otro lado no parece de peor calidad sonora (en cuanto a características de distorsión y señal/ruido), asegurando la mayor potencia posible. También entendería quien, por su estética, eligiera el más antiguo, ajustandose a cajas que sonando bien fuesen de alta impedancia y sensibilidad.