Yo soy anti-cacharros.
Intento actualizar y cuando no lo hago, es porque tengo suficiente.

Lo que no hago es tener lo nuevo y seguir con lo viejo.

Lo viejo, o lo guardo de recuerdo, o simplemente lo regalo y si no es posible, lo tiro.

Sigo hace tiempo esta regla, y es dividir el precio entre los años de uso. Eso me hace darme cuenta, lo poco que costó tal equipo.