La debacle del Blu-Ray ya no tiene discusión: incluso **Sony**, creadora del formato, ha decidido abandonarlo. Esto confirma una tendencia que era evidente desde hace años: el consumo digital domina. Las plataformas de streaming, el almacenamiento en la nube y las descargas legales han reducido la necesidad de discos físicos, cuyos costos de producción y distribución ya no compensan. Además, muchos usuarios prefieren la inmediatez y comodidad del contenido online. El Blu-Ray seguirá existiendo para coleccionistas, pero su ciclo comercial masivo está claramente terminado.