Hola Porthos.

A lo largo de la historia, la notación ha sufrido su correspondiente evolución: notación modal, notación mensural, mensural negra, mensural blanca... hasta llegar a la nuestra, la notación ortocrónica. Mucho antes de que apareciesen las primeras polifonías (organum) en diferentes manuscritos anónimos, estamos hablando del siglo IX y el siglo X, la música estaba principalmente subordinada al texto (al ritmo de la palabra). La textura era monódica y el registro escrito, la notación como la entendemos hoy, muy pobre (se me vienen a la cabeza los neumas gregorianos por ponerte un ejemplo), por no medir, no medían ni la duración de los sonidos. Con esto, sólo pretendo poner de manifiesto que debemos ser conscientes en todo momento que el desarrollo y perfeccionamiento de la escritura (notación musical) ha permitido la evolución musical inmensamente y facilitado en cierta medida el trabajo del compositor. Por ello no puedo estar de acuerdo contigo cuando dices que el arte musical sería algo más empobrecido con una notación más exacta, para nada, más bien al contrario.

Un último apunte: el solfeo es otra cosa... viene de la solmisación de Guido (epístola De ignoto canto, siglo XI). Saludos.