Yo tengo, literalmente, miles de discos, y no siento ninguna tentación fetichista de palparlos.

Desde mi más tierna infancia he vivido rodeado de discos (entonces se llamaban así, aunque estaban también hechos de vinilo), y cuando salió el CD fue un gran alivio ir dejándolos atrás. No te digo ya ahora, con millones y millones de pistas en las compañías de streaming. Sí, no está todo, pero lo que falta se puede conseguir generalmente en CD, y es muy rara la necesidad de comprar un disco. Concretamente, yo compré el último, por ahora, en el invierno del 2022. A lo mejor surge otra compra en el futuro, a lo mejor no, el tiempo dirá.

La nostalgia la siento por el gramófono y discos de pizarra.

Los precios a que se venden los discos ahora mismo (fuera del circuito de segunda mano) son risibles. La resurrección del vinilo, está muy clara a quién beneficia: a las discográficas. Hacen bien en aprovechar el momento, y sangrar a los compradores.

Bueno, me voy a escuchar luego un vinilo... Será "Sundown", del dúo folk holandés Sundown. Hay edición en CD, pero no he logrado conseguirla, debieron editar solo un puñado. Y no está en ninguna compañía de streaming, aunque sí en youtube subida desde el vinilo por un conocido hace ya años.

Escuchar música como una pueda o quiera. Eso es.