
Iniciado por
matias_buenas
Es que yo creo que HOY de haber diferencias no están ahí.
Cuando las hay (dando por hecho diseños correctos, claro), pueden venir de varios sitios antes :
1.- Un lector que no va bien :
me refiero al mecanismo mecánico de lectura y que lee con errores. Un CD de audio no es como un programa informático, en el que si hay demasiados errores no corregidos, no funciona. Un CD se puede leer con excesivos errores que pueden ser audibles (esto se daba mucho en lectores en los portátiles de pc) y no me refiero sólo al tema de los grillos o saltos.
También pasa, algunas veces, cuando la lectura óptica empieza a anunciar que va a morir. Esto pasa porque la lente enfoca al disco al estar inmersa en un campo magnético sujeta por unos alambrillos flexibles. Con el uso y dependiendo de la calidad de esos alambrillos, pues pierden su elasticidad y cogen holgura y no enfocan bien y por eso, muchas veces hay que meter el disco varias veces porque no lo reconoce siquiera o discos que antes reconocía, de repente no.
En cualquier caso, estamos hablando de problemas mecánicos.
2.- La circuitería
A veces lo que ocurre es que la circuitería que viene después del sat es inexplicablemente flojilla y añaden falta de linealidad, ruido o ciertas distorsiones.
También puede ser por el procesado posterior, voluntario o no. De hecho, existen lectores en las que el usuario elige el filtrado o el tratamiento de la señal.
Un ejemplo muy conocido es la Ps3 que tiene varios tratamientos de la señal ligeramente diferentes, por lo que tenemos un mismo lector que entrega sonidos diferentes pero, ojo, es por el tratamiento premeditado, por decirlo de alguna manera, que se hace de la señal, que no es lo mismo.
3.- Como muy bien dices, hay mucha más diferencia en una señal sin comprimir a una comprimida, pero ojo, que hay truco en esto.
Supongamos un tono puro de 1 Khz que grabamos en pcm a 16/44,1 (calidad CD). Pues bien, vamos a gastar o usar 1,4 Mbps.
Sin embargo, teóricamente podríamos gastar sólo 32 kbps y tener la misma señal. Y con técnicas dolby, mucho menos aún, porque sólo grabaríamos esa señal en un canal y un dato que le indique que haga lo mismo en el otro. Marco en negrita porque no es exactamente así en la realidad, pero casi.
Evidentemente, en una señal musical puede aparecer señal por todos lados, pero teniendo en cuenta nuestras limitaciones auditivas y cómo oímos, una buena compresión a un suficiente bit rate, en muchos casos, puede entregar una señal que aún siendo evidentemente diferente al original, en nuestro equipo y con nuestras orejas, puede sonarnos igual o prácticamente igual al original porque, paradójicamente, pueden existir más cuellos de botella en el resto de nuestro equipo que la que lleva la señal.
También es verdad que con el abaratamiento de los sistemas de almacenamiento y codificaciones tipo flac, uno puede decir, oye, que para qué voy a tener formatos sin pérdidas y no le faltaría razón, así que, eso, es una cosa que debe de definir cada usuario para SU disfrute personal. Eso, su equipo y su formato de oir música.
Saludos.