Cada uno entiende como quiere su afición.
Yo desde luego me habría montado un señor equipo de audio y video de una vez en una sala (en la que más tiempo me pueda pasar) y unos auris de fruta madre para estar en las demás.
Poquito a poco, sin prisas pero sin pausa y sin descapitalizarme mucho.

Pero ya digo, cada cual es un mundo y sabe sus circunstancias.