Kokotxo,una cosa es juzgar y otra es opinar. Estoy de acuerdo contigo en que no se debe juzgar libremente y mucho menos linchar a nadie., pero en ningún caso creo que se pueda negar el derecho a opinar sobre algo que él mismo proclama a los cuatro vientos. Porque en mi opinión jactarse publicamente de haberse trajinado a dos menores no ayuda a nadie. Y me da lo mismo que se quiera catalogar como simple literatura de ficción, porque no lo es cuando él mismo habla de ello en entrevistas.
Menuda mierda de ejemplo da a la sociedad, sea legal o no. Eso, a mí, me duele.
Y no creo que criticar esa actitud se pueda tildar de linchamiento.