En este caso sí, ya hay fallecidas por no haberse gestionado correctamente.
La principal especialidad debía ser los ingresos en cuenta por 300.000 pacientes. La muerte, colateral.Por su parte, el presidente de la Junta, Juanma Moreno, ha asegurado que el SAS trabaja “a contrarreloj” para revisar los casos y evitar que vuelva a ocurrir. “He tenido información muy tarde, los sistemas han fallado”, ha admitido (unos tres años hace que se denuncia), toda vez que se ha comprometido a la realización de una auditoría interna que determine “dónde estuvo el error y quién fue responsable”.