Marcuse, kokotxo, geniales vuestras aportaciones, debate muy interesante. Yo me decanto más por la línea de Marcuse. A pesar de que la película me encantó, pero sobre todo por que es un espectáculo audiovisual. Como película, chirría mucho, ya que como comenta Marcuse, es pretenciosa. Y si haces una película pretenciosa, lo primero es que tiene que ser coherente a nivel narrativo, aunque te pases por el arco del triumfo algunos temas, digamos, seudo científicos.
Los personajes no producen empatía (realmente me importó una mierda que el novio de la Rapace la palmase, por poner un ejemplo), hay situaciones absurdas y poco coherentes, y el montaje, a nivel artísitico, como bien dice Marcuse, es de pena. Las escenas se suceden casi sin orden ni concierto (hay algunas que no sabes a cuento de que vienen), llegó un momento en el que incluso estaba hasta desorientado.
La tengo en HD y le voy a conceder un segundo visionado, a falta del montaje del director... pero no creo que mejore mucho la cosa...