Aunque me cuenten una milonga me va a dar lo mismo, viendo a este triplete de nuevo junto, a sus edades, interpretando a sus alter ego cinematográficos bien vale una entrada de cine, y si además sacan a pasear a esa pareja de robots , al apagarse las luces del cine me puedo teletransportar sin problemas a la Via Layetana de Barcelona donde estaba el cine "Palacio del Cinema" y donde en el verano del 77 vi la primera película.
Snif, que nostalgia.