Jamás verás un LCD (con LED o sin él) con la definición, nitidez y tratamiento de los colores de un plasma. Sencillamente, no tienen nada que ver. Es como comparar un televisor de tubo con un LCD. El plasma ofrece la experiencia visual más próxima al cine que cabe en tecnología audiovisual y ningún LCD puede igualarlo, por mucha publicidad que le hagan a la retroiluminación LED. Sólo cuando la tecnología OLED se abarate y ponga a nuestro alcance televisores de 32", 37", 40" y más a precios razonables tendremos algo que pueda competir (y superar de verdad) a la tecnología del plasma.

Sencillamente, busca las calibraciones que te parezcan más idóneas para la tarea que en cada momento tenga que realizar el televisor (deportes, TDT, cine, juegos) y aplicalas. Pero olvidate del plasma paterno. Jamás conseguirás esa calidad de imagen.

Saludos