El BPI fue fundado en 1930. Los principales actores en la constitución del BPI fueron el gobernador del Banco de Inglaterra, Montagu Norman y su colega alemán Hjalmar Schacht, último ministro de finanzas de Adolf Hitler.
Schacht ayudó a Adolf Hitler a reunir fondos para sus campañas políticas. Incluso en 1932 Schacht organizó una petición de industriales para reclamar al presidente Hindenburg el nombramiento de Hitler como Canciller. Una vez en el poder, Hitler nombró a Schacht presidente del Reichsbank y luego Ministro de Economía en 1934.
En enero de 1937, Schacht fue nombrado miembro honorario del Partido Nazi y condecorado como tal.
El Consejo de Administración original del BPI incluía a varios representantes de la Alemania nazi: el ministro de Economía Walther Funk, un oficial de las SS llamado Oswald Pohl, Herman Schmitz, consejero de IG Farben y el Barón Von Schröder, el propietario del banco J.H.Stein Bank, en el que se depositaban los fondos de la Gestapo y otros fondos del Estado alemán que en otro banco hubieran quedado bloqueados.
Después de la Segunda Guerra Mundial, en 1944, en la Conferencia de Bretton Woods, el BPI llegó a ser la clave en una lucha entre la delegación estadounidense, formada por Harry Dexter White y por Henry Morgenthau, y la delegación británica, encabezada por John Maynard Keynes y Dean Atchison, representante de Chase Bank. Estos últimos intentaron vetar la disolución del banco.
Como resultado de las alegaciones acerca de que el BPI había ayudado a los alemanes a expoliar los activos de los países ocupados durante la Segunda Guerra Mundial, la Conferencia Monetaria y Financiera de Naciones Unidas recomendó la liquidación del BPI tan pronto como fuera posible. Esta tarea, que fue originalmente propuesta por Noruega y apoyada por otros delegados europeos y por Morgenthau y White nunca fue adoptada.