El de hoy es uno de los episodios que más me gusta del doble rasero mediático que impera en este país a la hora de tratar la información deportiva. Hoy, el Real Madrid vuelve a ser tratado como una auténtica víctima por los mismos que al descanso ayer echaban flores a un equipo que conseguía ganar 0-1 a base de contragolpe limpio - 32% de posesión -, para posteriormente decir que "mostró otra cara", cuando el Manchester City consiguió anotar el 1-1.
Comentaba ayer en Facebook antes de irme a descansar, que me parecía tremendo que en buena parte los mismos que califican el juego del Barça como aburrido, luego hablen de "baños tácticos", "partidazos", etc... por parte del Real Madrid con un 32% de posesión... Puede que a ellos les guste más ese juego, un juego donde el 68% del tiempo te lo pasas esperando a coger alguna pelota para poder hacer tres pases y marcar un gol, pero lo que no entiendo es porqué cuando esto lo hace Simeone, Di Matteo, Capello o cualquier otro entrenador, entonces ya no es tan divertido y no son tan "guapos"...
El 1-1 del Kun, impidió que se llevara acabo el ejercicio de renacimiento que todos los medios de comunicación tenían preparados tras fracasar con estrépito ante el Borussia Dortmund (muy buen equipo, pero ahora mismo 4º en la Liga alemana por detrás de Bayern, Schalke y Farnkfurt, recordemos...): "Gran Madrid", "golpe de autoridad", "imparable hacia la décima"...
Quizás por eso, porque el colegiado italiano Gianluca Rocchi se atrevió a señalar la primera pena máxima en contra del Real Madrid en lo que va de temporada (19 partidos nada menos), le han atacado con tanto frenesí, porque la acción entre Agüero y Arbeloa, si bien a mí tampoco me parece penalty, cuando menos ofrece muchas dudas - no hay más que ver el brazo de Arbeloa desequilibrando al Kun... - como para tener un mínimo de empatía con el colegiado y entender que en una decisión así, cualquiera puede fallar.
No fue así y un día más, en lugar de analizar el partido, se habla más del árbitro que de fútbol, lo que me lleva a preguntar: ¿No era de segundones?, ¿no era de acomplejados?, ¿no era que el Real Madrid ya no hablaba de árbitros y defendía el juego limpio en el deporte? Recordemos como al Barça en Riazor le señalaron un penalty que no era ni falta, que le hicieron un gol en una falta inventada y que le dejaron con 10 en una acción donde de nuevo no había ni falta... tres errores clamorosos en contra - no uno y muy dudoso -, ¿alguien vio que se hablara del árbitro? Por supuesto que no...
Esta es la diferencia. Si te equivocas contra ellos o a favor del Barça mínimamente, puedes estar seguro de que vas a ser la comidilla de la semana, mientras que si es al revés tiene que ser algo muy escandaloso para que pueda existir el debate. Triste y cruda realidad, la ausencia total y absoluta de rigor informativo que podemos contemplar, otro día más.