Que más quisiera yo, que no tener que presenciar este "espectáculo circense" y que las viejas rencillas fueran solamente eso. Pero es que, los fantasmas del franquismo ni son tales, ni son viejos. Están vivos y en plena forma. De lo contrario, cómo se explica que el actual gobierno presuma de dedicar cero euros de presupuesto a una ley aprobada en el Congreso de los Diputados como la "Ley de Memoria Histórica", al tiempo que destina más de trescientos mil euros anuales a una asociación dedicada a la exaltación de la figura del dictador.
Estas cosas no ayudan a cerrar heridas ni viejas rencillas. Creo que después de cuarenta años de democracia, un gobierno (sea del signo que sea) debería tener superados ciertos complejos y cumplir las leyes que se aprueban en el Parlamento. Aunque solo sea por respeto a la Cámara, sede de la Soberanía Nacional.
Saludos a todos.